El Nissan Leaf es el turismo eléctrico de la marca japonesa. Mide 4,49M de largo, 1,79 de ancho y 1,53 de alto. Se ofrece en 3 acabados: Acenta, N-Connecta y Tekna, y solo puede escogerse un motor eléctrico de 110kw con batería de 40kwh. Pronto estará disponible la versión e+, con un motor más potente, 160kw, y una batería de 60kwh, además de que esta batería tendrá refrigeración liquida en vez de por aire, como es el caso de la versión estándar. En esta prueba tenemos la ocasión de poder tener en nuestras manos la versión Tekna.
Este Nissan leaf fue fruto de la apuesta por la electrificación de Nissan, y la verdad es que no ha ido nada mal, pues ha resultado ser el vehículo eléctrico más vendido en el mundo. Gracias a su propulsión 100% eléctrica tendremos etiqueta 0, tan importante hoy en día para acceder a ciudades o lugares con restricciones, además de ventajas fiscales y, lo más importante, ser más respetuoso con el medio ambiente.
En esta segunda generación cambia totalmente la estética respecto a la primera generación, a pesar de que comparten misma plataforma. Las formas redondeadas del primer Leaf han abandonado a este nuevo modelo, al que le han dado un toque más europeo en su diseño. La parte delantera destaca por la ausencia de calandra, habitual en los vehículos eléctricos. El diseño en forma de V hace resaltar el capó y la tapa donde se encuentran las entradas de carga. Junto a la insignia de Nissan encontramos un fondo negro donde podemos apreciar unos detalles en azul, remarcando el carácter eléctrico. En el lateral destacan las bonitas llantas de 17 pulgadas y el pilar C, de color negro para simular un techo flotante, continuando hasta formar un spoiler. En la trasera encontramos unos faros similares en forma a los de su hermano el Juke, y una zona negra que aparenta ser el cristal del portón del maletero. En la parte baja encontramos un difusor negro adornado por una línea azul. Los emblemas Zero Emission y los detalles azulados inciden en la importancia de que nos encontramos ante un vehículo 100% eléctrico.
Respecto a la carga de este Nissan Leaf, la carga completa puede realizarse, dependiendo de la potencia del cargador, entre 8 y 16 horas. la autonomía total es de 270km según el ciclo WLTP, por lo que para el día a día este vehículo es perfecto, pudiéndolo recargar toda la noche.
En el interior encontramos buenos materiales. A pesar de que son plásticos duros, poseen buen anclaje y no crujen. El diseño o estilo de este habitáculo no se diferencia del resto de modelos de la gama Nissan, aunque nos encontremos en un vehículo eléctrico y futurista. El acceso y arranque es sin llave. El puesto de conducción es perfecto: asiento muy cómodo y volante de diametro y material fantástico, pero no tiene regulación en profundidad. El cuadro de instrumentos se compone de un velocímetro analógico y una pantalla digital con muchísima información, tanto del sistema multimedia como de todo el sistema eléctrico y ayudas a la conducción. En la consola central encontramos la pantalla de infotainment de 7 pulgadas con navegación y conectividad. Mención especial al audio Bose, de 6 altavoces y subwoofer, que nos deleitarán los oidos. En cuanto a cámaras, no habrá ningún problema en saber qué ocurre alrededor, pues posee cámaras 360º. El climatizador no dispone de un display, sino que la información de intensidad o temperatura nos será mostrado en la pantalla anterior. En este área de climatización también disfrutamos de asientos y volante calefactables. Por último, junto al reposabrazos central se encuentra un Joystick o selector de marcha, heredado del anterior Leaf.
Las plazas traseras son igual de cómodas que las delanteras, pues los materiales de la banqueta siguen siendo de cuero blanco con buen mullido. El espacio para piernas es bueno, sin embargo el de la cabeza se ve algo reducido. La plaza central es más estrecha y se ve dificultada por el tunel de transmisión, muy pronunciado.
El maletero es de apertura manual, y dentro encontramos 394 litros. En los laterales hay redecillas para dejar los cables de carga, y una compuerta donde se encuentra el kit antipinchazos. Si abatimos los asientos de las plazas traseras conseguimos 1.176 litros.
En marcha podemos comprobar lo fácil y cómoda que es la conducción con este Nissan Leaf. El conjunto eléctrico es de un motor de 110kw (unos 150cv) y 40kwh de batería. El empuje es fantástico y no se echa en falta potencia en ningún momento. De hecho, realiza el 0-100 en 7,8 segundos. La velocidad máxima está limitada a 144km/h, dato que nos hace ver que Nissan ha dirigido la función de este Leaf a una conducción urbana. La autonomía según el ciclo WLTP es de 270kms. La dirección es precisa, y junto a la suspensión realiza un gran trabajo, filtrando muy bien los baches de la carretera. El freno es eficaz y actúa muy bien sobre los 1.560kg que pesa este Leaf. En cuanto a consumos, hemos conseguido un consumo de 15,5 kwh a los 100kms. Como novedades en la conducción tenemos el Pro Pilot y Pro Pilot Park, y el e-Pedal.
El Pro Pilot es el conjunto de ayudas a la conducción como el control crucero adaptativo o la corrección de volante otorgado por el cambio involuntario de carril. Estas ayudas están enfocadas hacia una futura conducción autónoma. También tenemos aviso de ángulo muerto. El Pro Pilot Park es el asistente de aparcamiento autónomo, en el que el piloto no tendra que hacer nada, este Leaf cambiara marcha y girará el volante hasta aparcarse él solo. Por último, el e-Pedal hace que el motor tenga más retención y hará que no tengamos que utilizar el freno en ciudad, pues al comenzar a decelerar el coche decelera con más fuerza. Es decir, con un sólo pedal podremos conducir perfectamente en ciudad.
Las luces LED que dispone este Nissan Leaf destacan por su gran calidad de alumbrado y de tono. También posee luces largas automáticas, lo que hace aun más cómoda la conducción nocturna. Los precios parten desde los 33.000 euros. Nuestra versión se encuentra en torno a los 37.000 euros.