El toyota Prius supuso el comienzo de toda una revolución, la revolución híbrida. Fue el primer modelo de masas de la marca en utilizar la tecnología híbrida autorrecargable, consolidando los cimientos de lo que conocemos hoy en día. Tras más de veinte años a sus espaldas, es hora de dar la bienvenida a la quinta generación, y Toyota lo hace de una manera muy especial, ya que es el primer modelo de la marca en estrenar la tecnología híbrida enchufable.
Tres son los acabados entre los que elegir en este PHEV: Advance, Solar y Luxury. La versión que probaremos es la Solar, que incluye paneles solares en el techo que aseguran una mayor autonomía en modo eléctrico. El nuevo Toyota Prius Plug-in mantiene el motor térmico de gasolina de cuatro cilindros que equipaba el Prius Electric Hybrid: el 1.8 litros de ciclo Atkinson de 98 CV de potencia; que combinado en este caso con los dos motores eléctricos de 72Cv y 31Cv, el conjunto ofrecerá 122Cv.
Los motores eléctricos toman su energía de una batería de iones litio de 8,8 kWh, con la que homologa una autonomía eléctrica de 45 kilómetros, por lo que disfruta de la etiqueta CERO de la DGT. Con esta configuración, Toyota nos promete un consumo en ciclo mixto entre 1,3 y 1,5L a los 100Km, por lo que se convierte en un híbrido enchufable muy interesante si queremos realizar bajos consumos.
Desde el acabado de acceso, el Prius viene realmente bien equipado, con los sistemas de asistencia a la conducción Toyota Safety Sense, faros LED matriciales y un sinfín de equipamiento, partiendo así desde los 33.900 euros. Nuestra unidad de pruebas con el acabado Solar se sitúa en 37.150 euros.
El interior del Toyota Prius PHEV es continuista con la generación saliente, manteniendo la misma distribucción de elementos en el salpicadero. La instrumentación se sitúa en una posición central y en formato panorámico, ofreciendo una visibilidad frontal inmmejorable. Los materiales empleados en el habitáculo son correctos, con buenos ajustes, pero abusa del negro piano en gran parte del salpicadero. Las dos pantallas TFT de 4´2″ del cuadro de instumentos ofrece una gran cantidad de información, siendo la de la izquierda la que muestra los datos esenciales de conducción como son la velocidad y tanque de combustible. La pantalla secundaria muestra todos los datos relacionados con el ordenador de abordo, como todos los datos del sistema híbrido, la navegación, las ayudas a la conducción y los consumos.
El sistema de infoentretenimiento de 8″ es el conocido TOUCH 2 & Go de Toyota, con buenos grafismos, cantidad de aplicaciones y buena legibilidad. La única pega que podemos ponerle al sistema es que se ha quedado algo anticuado respecto a los de su competencia, con un diseño algo envejecido y con una respuesta un tanto lenta. No obstante, el sistema viene bien conectado con las últimas soluciones en conectividad, como son Android Auto y Apple Car Play. En todas las versiones, si conectamos la marcha atrás, encontraremos una cámara de visión trasera, aunque sólo contará con sensores delanteros y traseros en el acabado Luxury.
El puesto de conducción como hemos comentado es muy cómodo gracias a la total visibilidad que ofrece esta configuración. Esta comodidad se completa gracias a unos buenos asientos con buen mullido y calidad de tapizado. La banqueta y respaldo son anchos, lo que ofrecen buena habitabilidad a personas corpulentas. Su ajuste es manual, muy sencillo de encontrar la posición óptima para conducir.
Las plazas traseras del Prius PHEV ofrecen muy buena habitabilidad, con muy buen espacio tanto para rodillas como para cabeza. Las plazas a su vez son anchas gracias a la verticalidad del lateral. Como soluciones en esta segunda fila encontramos anclajes ISOFIX, una toma de 12V tipo mechero, huecos en la parte inferior de las puertas, elevalunas eléctricos y bolsillos tras los asientos delanteros. Si abatimos la plaza central, encontraremos un reposabrazos integrado con dos porta bebidas. Por ende, la plaza central es muy dura y queda relegada a emergencias.
El maletero es quizá el único aspecto negativo del PRIUS, ya que es bastante pequeño para una carga moderada. Ofrece 354L, que sobre el papel no están mal, pero tememos que tener en cuenta que esa es la capacidad desde el piso hasta la luneta trasera. Si queremos ocultar la carga, tenemos a nuestra disposición una bandeja cubre maletero, que reduce hasta la mitad la capacidad. Los cables quedarán sueltos por el maletero, ya que no encontramos ningún hueco para guardarlos. Si queremos aumentar la capacidad, podremos abatir la segunda fila de asientos, llegando así hasta unos respetables 1360L.
El sistema híbrido enchufable que estrena el Toyota Prius está compuesto por 3 elementos principales: mantiene el motor de gasolina de 1.8L de cubicaje, ciclo Atkinson, atmosférico y con 98CV. Por parte del sistema eléctrico encontramos dos motores: un motor principal de 72Cv y otro secundario de 31Cv. El sistema está alimentado a su vez por una batería de acumuladores de Ion Litio con una capacidad de 8,8 KWh, que nos asegura una autonomía homolagada en modo eléctrico de 45Km, según el ciclo WLTP.
Es un sistema que al igual que pasa con los híbridos autorrecargables de Toyota, se comporta a las mil maravillas, sabiendo gestionar a la perfección la energía disponible y repartiéndola por el sistema de manera eficiente. El sistema sabe en todo momento que utilizar, si el motor térmico, el eléctrico, ambos a la vez… La comunicación es constante entre ambos propulsores y la información es transmitida inmediatamente al conductor a través de los sistemas del vehículo.
Controlaremos el sistema a través de un cambio automático de tipo CVT, tan común y extendido en los coches híbridos. Es un cambio sencillo, con una directa, una marcha atrás y un modo B. El modo B sirve para forzar al motor a retener la marcha y así poder recargar más la batería a través de la frenada regenerativa. La principal virtud de este cambio es su comodidad y sencillez, pero su mayor inconveniente es su rumorosidad, ya que fuerza al motor a elevar las revoluciones para empujar desde la parte alta del cuentarevoluciones al no contar con marchas.
Existen 3 modos de conducción: ECO, NORMAL y POWER, que afectan al comportamiento dinámico y respuesta a la aceleración. No apreciamos una gran diferencia entre los modos, siendo el más recomendado por ello el modo ECO para realizar buenos consumos. A su vez, tendremos a nuestra disposicón el modo híbrido y el modo 100% eléctrico (siempre que la carga de la batería sea suficiente), teniendo además el modo EV CITY para circular por ciudad en modo eléctrico más eficientemente.
La carga en el Toyota Prius PHEV puede realizarse de dos formas: a través de un enchufe tradicional de casa (Tipo schuko) y mediante un «Tipo 2» a 3,6Kwh. Ambas opciones son mediante corriente alterna, y tardará en cargar al 100% unas 4 horas en el primer caso y en unas dos horas aproximádamente con el «Tipo 2».
La versión Solar, que es la que nos ocupa, ofrece dos placas solares integradas en el techo para aumentar ligeramente la autonomía eléctrica declarada. Sirve más como una ayuda que como un medio de recarga, ya que su función principal es la de desahogar la carga de trabajo a la batería supliendo de energía a los sistemas multimedia del coche como las pantallas y las tomas de carga para cargar algún dispositivo. Su funcionamiento varía según las condiciones meteorológicas, siendo la potencia máxima en un día soleado de unos 150W. A pesar de ser un sistema auxiliar principalmente, las placas solares también son capaces de recargar las baterías mientras estemos estacionados, pero no esperes una gran recarga dadas las limitaciones.
Los consumos sorprenden, y mucho. El Toyota Prius PHEV homologa un consumo medio en modo híbrido de unos 1,3 – 1,5L/100 km, cifra muy atractiva sobre el papel. El consumo obtenido en nuestra prueba tras más de 1200 kilómetros fue de 4,3L, cifra muy espectacular dadas las circunstancias de la prueba. Tuvimos la oportunidad de realizar un viaje largo por carretera (más de 800 kms) y el consumo se estabilizó en esos 4,3L. Forzando el coche, realizando una conducción dinámica y utilizando el modo POWER Nos fue imposible ver cifras superiores a los 4,5L. Su comportamiento por tanto en carretera abierta en sencillamente espectacular, sorprendiendo con la soltura que ofrece y la gran comodidad en marcha.
La dirección y suspensión del Prius es realmente cómoda, acompañando a la esencia del coche. La dirección es correcta, sin tener una dureza excesiva o ser muy blanda. Su tarado es medio y nos permite llevar el coche con gran facilidad. La suspensión al igual que la dirección tiene un tarado medio, consiguiendo filtrar sin problemas los desperfectos de la carretera.
El equipamiento del Toyota Prius PHEV es muy amplio, viniendo muy equiado desde el acabado de acceso. En el acabado SOLAR el equipamiento en cuanto elementos de seguridad y ayudas a la conducción es el siguiente:
- Cámara de visión trasera
- Sist. Seg. precolisión detector peatones+ciclistas
- Asistente de cambio involuntario de carril
- Reconocimiento señales de tráfico
- Control Adaptativo Luces de Carretera
- Distribución elect. Frenado EBD+ABS
- Avisador frenada emergencia (EBS)
- Luces freno traseras LED
- Luces de bordillo
- Luces de circulación diurna LED
- Faros antiniebla delanteros
- Ajuste automático altura de faros
- Ópticas traseras tipo LED
- Limitador velocidad (ASL)
- Asistente arranque en pendiente (HAC)
- Control de tracción (TRC)
- Avisador presión neumáticos (TPMS)
- Sistema control estabilidad (VSC)
- Faros LED Adaptativos
- Asistencia cambio de carril