El Toyota Camry es la berlina más grande y de representación que vende la marca nipona en España. Comparte prácticamente todo con el Lexus ES300h ya visto en el canal y ahora vamos a ver los cambios más importantes que ha recibido con este restyling, que son pocos y no se aprecian apenas. El más claro lo vemos en el parachoques delantero con un nuevo diseño y una parrilla más grande y por supuesto con un nuevo diseño. Las llantas van de las 17 a las 18 pulgadas y son de nueva factura, todo lo demás es idéntico al anterior.
Se ofrece en dos acabados Advance y Luxury (como es el caso de nuestra unidad) con equipamientos cerrados donde solo es opcional el color de la carrocería, que por cierto existen 6 distintos, y la propulsión sigue siendo la misma de 218cv híbrida autorrecagarble con etiqueta ECO de la DGT y un cambio automático e-CVT.
El interior no presenta grandes cambios, pero si que hay un par muy importantes, como es la sustitución del simil de madera, que se veía algo fea, por un simil de madera en color más oscuro y mejor tacto. Otro punto positivo es que se han instalado levas detrás del volante, para mejorar la experiencia de conducción. Y ya por último el cambio más importante, es que la pantalla central de 9” con aplicaciones para Apple Car Play y Android Auto, navegación, cámara de visión trasera… Ha pasado a estar en una posición más alta, bajando las salidas de aire centrales, con esto mejoramos la atención al volante, sin tener que desviar mucho la vista de la carretera.
Por lo demás todo es igual, un gran espacio interior con una alta confortabilidad para todos sus ocupantes tanto delante como detrás, una buena calidad de materiales y conservando botones físicos para todo, algo que nos encanta.
El maletero sigue conservando su gran capacidad de 524 litros, aunque su boca de carga no es la más cómoda del mundo, pero si que es mucho más cómoda, gracias a su anchura, en comparación con otras berlinas de 4 puertas del mercado.
En marcha este Toyota Camry es más que confortable, gracias a su buena calidad de rodadura, su ergonomía y el empleo de buenos materiales en su interior. El propulsor híbrido de este Camry mueve de maravilla los 1670kg que pesa esta berlina, hasta con cuatro ocupantes y el maletero lleno. La caja de cambios funciona con mucha suavidad, algo que se agradece en el día a día y circulando en ciudad, pero que en un carretera de montaña si queremos sacar algo de partido al motor, nos vemos limitados debido a que se revoluciona más de lo deseado y no es tan efectiva como una caja de cambios de doble embrague o convertidor de par. El motor se revoluciona de manera contundente cuando le pisamos a fondo al acelerador, pero es algo normal en estos cambios CVT. Por cierto este cambio CVT se trata de la última actualización de Toyota, el cual va más refinado y emite menos ruido del motor de gasolina en el interior. En esta caja de cambios tenemos un modo S con seis velocidades virtuales (como ya sabemos, los cambios CVT solo tienen una marcha) que se encargan de retener más o menos le vehículo y no tener que abusar de los frenos. El consumo homologado es bajísimo, y es que en el ciclo WLTP el resultado ha sido de 5,5 litros. Nosotros durante nuestro recorrido de más de 2.000km, nos ha marcado en la pantalla TFT un consumo de 5,5 litros, el mismo consumo que homologa la marca, lo cual nos parece algo espectacular, teniendo en cuenta las dimensiones del coche, que tiene 218cv y sobre todo su peso.
La suspensión a pesar de tener un tarado blando, no balancea en exceso y el coche se nota estable en curva, filtrando de maravilla todas las irregularidades del terreno y notando que en carretera abierta, vamos en su interior flotando. La dirección tiene la dureza y el tacto perfecto y con los modos de conducción (Eco, Normal, Sport y EV) varía su dureza. Estos modos de conducción también mejoran la respuesta del motor, si necesitamos más potencia en un momento puntual. El modo EV se podrá activar en ocasiones contadas, ya que dependemos de que la batería que alimenta al motor eléctrico tenga una carga mínima.
Los frenos paran bien a esta gran berlina, pero el primer recorrido del pedal del freno no notamos prácticamente nada, ya que está acoplada a la propulsión eléctrica, para que esa frenada se aproveche y se guarde esa energía en la batería.
Respecto a las ayudas a la conducción, contamos con las ayudas Toyota Safety Sense que nos incluye de todo (Aviso del ángulo muerto, Aviso del cambio involuntario de carril con corrección del volante, Reconocimiento de señales de tráfico, Control crucero adaptativo con Stop&Go, Aviso de precolisión con frenada de emergencia, Aviso del tráfico trasero cruzado con frenada, sensores de aparcamiento delanteros y traseros con cámara de visión trasera…).
Los precios para el Camry parten desde los 41.000 euros hasta los 45.300 euros de nuestra unidad con el acabado más alto.