El Polestar 2 es el turismo eléctrico de la marca sueca. Como parte del grupo Volvo, llegó a España el año pasado, siendo este modelo el primero en comercializarse. Mide 4,60M de largo, 1’86 de ancho y 1’48M de alto, y su distancia entre ejes es de 2’73M. Se ofrece en varias versiones dependiendo de la capacidad de la batería y del número de motores que integre: así pues está disponible la versión Standard Range Single motor, con batería de 69kwH y un motor con 231cv; Long Range Single Motor que aumentaría su capacidad de batería hasta los 78kWh; Long Range Dual motor que añadiría otro motor eléctrico, aumentando la potencia hasta los 408cv; y por último la versión que vamos a probar hoy, que sería esta última pero con el Performance Pack, con una potencia final de 476cv y varios elementos deportivos para mejorar su dinamismo y sensaciones, con una autonomía según el ciclo WLTP de más de 455km. Por cierto, las versiones de dos motores supone que este vehículo tenga tracción a las cuatro ruedas.
Su estética mantiene la esencia de una berlina, aunque algo vitaminada y musculosa debido a su altura y diseño de paragolpes. En la parte delantera nos reciben unos faros con el martillo de Thor, aspecto típico de los Volvo, una parrilla cerrada al estilo VE, y un logo de Polestar Engineered, que nos especifica que estamos ante la versión Performance.
El lateral nos sorprende con unas llantas forjadas de 20”, frenos Brembo en color amarillo y bajos de plástico negro, un detalle más propio de un SUV. También integra techo panorámico y en la trasera los faros recuerdan a los propios de las berlinas de Volvo, aunque en este Polestar acaban uniéndose en su parte inferior. El color de la carrocería es el blanco nieve.
En cuanto a la carga, el Polestar 2 que estamos probando con 78kWh admite carga en C.A. a 11kW, y en C.C. a 155kW, lo que le permitiría cargarse hasta el 80% en 35 minutos. En nuestro punto de carga Velo HOME instalado por nuestros amigos de PRM, a una potencia de 7,4kW hemos cargado este Polestar al completo en algo más de 12h.
El interior destaca por su sencillez y buena calidad de materiales, con toques que recuerdan a Volvo. Lo que más llama la atención es la pantalla de 11″ en disposición vertical que integra todo acerca de este vehículo, y eso tiene un aspecto positivo y otro negativo: es super completo y dispone de todo tipo de información referente a cada apartado del vehículo, además es un sistema basado en Android; el negativo es que tiene tanta información que los primeros días de uso costará adaptarse. El cuadro de instrumentos es digital y tiene una calidad excelente, pero la interfaz es muy limitada y solo podrá verse en dos vistas. Los asientos Wave Tech de esta unidad están muy bien construidos, disponen de calefacción en 3 intensidades y reglajes eléctricos. Como elementos extras tenemos que nombrar el techo panorámico y el sistema de sonido Harman Kardon que suena excelentemente.
Las plazas traseras gozan de un espacio notable para los ocupantes de los laterales, aunque la plaza central se ve mermada por el tunel de transmision. Dos pasajeros viajarán realmente bien en todo tipo de trayectos, y además encontramos sonido Harman Kardon, tomas USB de tipo C, calefacción en 3 intensidades y anclajes ISOFIX.
El maletero es de apertura eléctrica y dentro encontramos 405L de capacidad, y otros 35L en el maletero que hay debajo del capó, que nos servirá para dejar los cables de carga. Es un maletero con formas regulares y un piso que está prácticamente enrasado con la boca de carga. Podemos abatir las plazas traseras en disposicion 60-40 para ganar más litros.
Dinámicamente es un coche rapidísimo, contundente, con buenas reacciones y con una autonomía correcta, aunque podría ser mejor. Su batería de 78kWh nos permite hacer en condiciones reales 400km si no hacemos un uso exigente. Estaremos rondando un consumo de entre 20 y 22kWh a los 100, una cifra elevada respecto a sus alternativas. Sin embargo, la potencia y los números de este Polestar no engañan: realiza el 0-100 en tan solo 4,4 segundos, y su aplomo y ligereza en curva nos hacen olvidar de que estamos a bordo de un coche eléctrico.
La dirección se puede regular en 3 durezas distintas, aunque la más dura no llega a ser nada extremo. Las suspensiones están firmadas por Ohlins y tienen 21 puntos de anclaje, aunque para regularlos no se puede hacer desde dentro del vehículo, sino que tendremos que levantar con un gato o elevador el coche para poder cambiarlo manualmente. Son suspensiones firmes, que proporcionan una gran estabilidad en curva y realizan un filtrado bueno. Los frenos Brembo son de 4 pistones y disco de 375mm en el eje delantero, y actúan de diez sobre los 2.100kg que pesa esta unidad. Las ayudas a la conducción son abundantes, siendo este Polestar 2 un coche muy seguro: aviso de ángulo muerto, aviso de precolisión con frenada de emergencia, alerta de tráfico cruzado, aviso de cambio involuntario de carril con corrección, control crucero adaptativo, Drive Pilot, cámaras 360 con sensores…
Los precios parten desde algo más de 47.000€, mientras que nuestra unidad de pruebas con todos los extras que veremos a continuación está en torno a 68.400€. Aquí tienes la videoprueba que hemos realizado: